Este es un anuncio oficial, no lo puedo seguir ocultando... hace 6 semanas y media llevo una doble vida; En semana salgo muy elegante cada mañana a trabajar como una arquitecta, con toda la indumentaria, una princesa de pies a cabeza, pero cuando se acerca el fin de semana me voy preparando para llevar mi "otro" rol.

Y es sábado 7:00am, me levanto, desayuno como si fuera la primera y la única comida del dia, me pongo lo mas viejo que encuentre en mi armario y me dirijo a cumplir mi papel......durante los fines de semana la mente se deja llevar por pensamientos mientras los brazos hacen un trabajo mecánico, si, en los fines de semana soy una obrera.

Y cuando hablo del termino obrera, lo digo en todo el sentido de la palabra, no lo confundan con decoración, he aprendido a demoler muros, desmontar cocinas, instalar lavamanos, y no hablemos de carpinteria, lo mio son las puertas, aprendí que los únicos muros derechos están en mis planos, y que tratar de estucar sin haberlo hecho antes, es una perdida de tiempo.
También aprendí que no debo mirar para arriba cuando estoy pintando el techo, a no ser que quiera quedar cegada debido a una gota de pintura.

Y bueno después de dos largos dias de martillar, lijar y pintar; con la cara cubierta de pintura y un look de post-guerra, comienzo a preparme para cambiar el rol, me toma literalemente la caminata desde la nueva "guarida"hasta mi casa actual, de esa manera le doy un tiempo a mi cuerpo y a mi mente para mutar tranquilamente, en la calle, como cualquier superhéroe. (mas adelante les contare mi teoría del porque los superhéroes se transforman en la calle).

Lunes 7:00am, en modo arquitecta, lista para empezar otra vez, el fin de semana quedó en el pasado, no queda un solo rastro solo la satisfacción del deber cumplido.
LLego a la oficina me siento en al frente de mi computador con mi taza de té, depronto alguien se acerca y me dice: que es esa gota blanca que tienes en la frente? Y yo pienso, mierda me descrubrieron.